lunes, 28 de octubre de 2013

PARTE 8ª: PROTOCOLO PARA RECUPERAR LA FLEXIBILIDAD METABÓLICA. LA INEFICIENCIA DEL MOVIMIENTO

      Llegamos a la parte más complicada de todo el protocolo; la que seguramente va a requerir más explicaciones. 

      Tenemos ya una rutina, pero la forma de ejecutarla va a diferir completamente de lo que habitualmente acostumbramos a hacer cuando trabajamos con pesas. Pero antes de meternos de lleno con ciertas paradojas que se van a a dar, me gustaría irme a una de las patas de la silla de la que hablábamos en el segundo post, en concreto, ,la relajación-meditación (Aquí). Vamos a salirnos de la fría objetividad que muestran las barras y mancuernas de cualquier gimnasio, para adentrarnos en el mundo de las sensaciones. En la mente se encuentra la clave del cambio, sea este del tipo que sea; el cómo se ejecutan determinadas tareas, dependerá en gran medida de nuestra capacidad para implicarnos con lo que estamos haciendo, y para ello será necesario un profundo conocimiento de nuestro cuerpo (y de algo más como veremos luego).

miércoles, 23 de octubre de 2013

PARTE 7ª: PROTOCOLO PARA RECUPERAR LA FLEXIBILIDAD METABÓLICA. RUTINA DE HIPERTROFIA

   Después de la breve introducción del post anterior, ya sabemos que para conseguir unos objetivos es necesario seguir un procedimiento, un método, una rutina...,o como queramos llamarlo, ésto es "lo qué hacemos"; que será importante (pero hasta cierto punto). 

     Si nuestro interés está centrado, por ejemplo, en la hipertrofia, correr todos los días grandes distancias no es el sistema más adecuada para dotarnos de una adecuada masa muscular. Está claro que para conseguirla, ¡debemos trabajar con grandes pesos!. Bueno, no descubro nada nuevo, ésto lo sabe cualquiera, ¿verdad...?; es tan evidente, que seguro nadie lo pone en duda. Pero lo primero que debemos hacer es no secundar tan rápidamente tales afirmaciones sin estar seguro de ello. Siempre digo que cuando algo se desconoce lo mejor es emplear el sentido común, pues bien, existen casos, como éste, en el que el sentido común tampoco es suficiente como para dotarnos de una respuesta completamente satisfactoria, me explico, podemos pensar que al levantar 10 kg, en press de banca durante 10 repeticiones conseguiré un aumento proporcional en fuerza y masa muscular, pero si en lugar de esos diez kilos, levanto veinte, obtendré mejores resultados, y así, de este modo, al llegar a 100kg, mi fuerza y mi musculatura se habrán desarrollado de manera espectacular, ¿verdad?, el sentido común me dice que así será. Pero en realidad no es éste sentido el que me otorga la respuesta, sino más bien la creencia de que esto ocurrirá así. De momento, esto lo dejamos aquí, pero ya veremos en otro post como esta lógica, de andar por casa, que es el sentido común, al final, nos dice algo diferente.

lunes, 21 de octubre de 2013

LA ENFERMEDAD EMPIEZA EN EL INTESTINO

   ¿Y si todo fuese tan simple que pudiéramos señalar un único origen para la mayoría de las enfermedades actuales?. Desde el Síndrome Metabólico, pasando por la Diabetes, las Enfermedades autoinmunes, el Cáncer...

   Si nos damos cuenta, todas las enfermedades actuales parecen tener un nexo en común..., y una señalar directamente a otra, y esa otra, a otra más. Es como bajar por una siniestra escalera, donde en cada planta y  antes de descender un nuevo tramo, alguien nos fuese endosando una terrible enfermedad, en cada rellano, una distinta y peor que la anterior, así hasta llegar definitivamente a la última planta...

   Si pudiésemos retomar el sentido ascendente de nuestra escalera y pudiéramos llegar a la planta donde todo comenzó, ¿qué es lo que nos habrían dado?, ¿cuál sería esa sutil enfermedad que pasó desapercibida...?. ¿Estrés?, no, quizás habría que subir una planta más, ¿un ligero reflujo gastroesofágico?, no, hay que subir más, otra  planta, ¿hinchazón y gases?, voy a subir una más por si acaso; nada, ahora no hay absolutamente nada. Pero, ¿entonces...?, ¿donde se originó todo?, no me puedo creer que unas ligeras molestias en el estómago puedan derivar en una enfermedad tan terrible como el cáncer... o tal vez sí.

   Sé que puede ser un tanto pretencioso reducir la gran mayoría de las enfermedades a un origen común, pero esto no es algo novedoso..., Hipócrates ya dijo hace más de 2000 años que:"todas las enfermedades tienen su origen en el intestino". Pero..., ¿realmente esto puede ser así?. Yo pienso que sí. Ahora vamos situarnos nuevamente en ese planta en la que simplemente nos encontramos bien, y vamos a ir descendiendo progresivamente las escaleras que nos conducen "a los infiernos" (¡qué melodramático! je,je).

jueves, 17 de octubre de 2013

PARTE 6ª: PROTOCOLO PARA RECUPERAR LA FLEXIBILIDAD METABÓLICA. HIPERTROFIA

   ¿Qué es lo que nos hace mejorar?

    Antes de comenzar con el entrenamiento de hipertrofia, me gustaría resolver ésta "sencilla" cuestión, pero de gran importancia para entender cuales son esos procesos que nos benefician o nos penalizan a la hora de lograr nuestras metas y objetivos. Cada uno de nosotros tiene unas específicas capacidades innatas, éstas son las características individuales con las que nacemos y que, en definitiva, podrían mostrar sutiles diferencias  metabólicas, fisiológicas, estructurales, psicológicas o intelectuales, capaces de dotarnos de ciertas ventajas o desventajas en uno o varios de estos planos, condicionando, para bien o para mal, nuestras posibilidades futuras, es decir, esas capacidades específicas y únicas, señalan nuestro posible potencial, delimitando claramente nuestro máximo e hipotético desarrollo.

lunes, 14 de octubre de 2013

PARTE 5ª: PROTOCOLO PARA RECUPERAR LA FLEXIBILIDAD METABÓLICA.HIPERTROFIA

   Seguimos con los distintos entrenamientos que vamos a realizar. De momento la prioridad es la de restablecer el adecuado uso de ácidos grasos, algo que considero fundamental por dos motivos:
  • Poder adelgazar con eficacia, en caso de ser necesario.
  • Evitar la acumulación de intermediarios lipídicos en el interior de la célula, los cuales tienen la facultad de interferir en la señalización de la insulina disminuyendo la captación de glucosa.
  Ambos motivos están relacionados con la salud, pero, ¿y el rendimiento?, lógicamente el máximo en nuestra capacidades, solo puede venir dado cuando la salud está presente; pretender estirar a toda costa nuestro físico con el fin obtener el máximo rendimiento solo podrá traer problemas en el futuro. 

sábado, 12 de octubre de 2013

PARTE 4ª: EMPEZANDO A OXIDAR LOS ÁCIDOS GRASOS

Repasemos las patas de nuestra silla:

  • 1º VOLUNTAD
  • 2º RELAJACIÓN-MEDITACIÓN
  • 3º ENTRENAMIENTO
  • 4º NUTRICIÓN
 De momento solo hemos hablado algo de ENTRENAMIENTO y NUTRICIÓN, pero antes de proseguir es necesario recapitular lo visto hasta ahora. 

  En relación al entrenamiento, he comentado que este puede ser de dos tipos de intensidad: el de moderada a baja intensidad (BMI)y el de alta intensidad (AI). Mientras que el primero debe realizarse durante todos los días de la semana, el segundo, tendríamos suficiente con hacerlo dos o tres veces. Significa esto, que el día que realicemos alta intensidad también deberemos realizar el de baja, por tanto, necesitaremos una hora y media para completar el entrenamiento. Las opciones que se nos presentan son las siguientes:

  1. Realizarlo todo seguido.
  2. Fraccionarlo en dos partes; primero el aeróbico, y luego, en otro momento del día, el "anaeróbico", o viceversa, primero alta intensidad y luego el de intensidad inferior.

jueves, 10 de octubre de 2013

PARTE 3ª: EMPEZANDO A OXIDAR LOS ÁCIDOS GRASOS

En ésta primera fase hay cosas que debemos tener en cuenta:

  •  No vamos a realizar ayunos intermitentes prolongados. De momento, nos contentaremos con tres comidas diarias.
  •  Nuestra alimentación debe ser moderada y equilibrada. Esto quiere decir que debemos ser comedidos con las calorías ingeridas, pero además procuraremos que no sea excesivamente alta en grasas y ni mucho menos cetogénica. 
  • Haremos ejercicio suave y prolongado. Deberá ser a diario, fines de semana también. Se empezará con media hora pero progresivamente lo aumentaremos hasta llegar a una hora al día. Se puede elegir cualquier actividad que lo permita, como andar-correr, nadar, pasear en bicicleta, o ejercitarse en cualquier máquina que haya en un gimnasio, como puede ser el Remo, Step, etc. Evitaremos no obstante las clases colectivas (de momento), por la tendencia a trabajar en un umbral de pulsaciones demasiado elevadas. Lo mejor es variar de ejercicio, cuanto más mejor. De lo que se trata no es simplemente acumular "horas de vuelo", sino también, que impliquemos a distintos grupos y fibras musculares. Tratamos de aumentar el número de mitocondrias, y estas serán creadas, única y exclusivamente, en las fibras musculares trabajadas
  • Reservaremos dos(para los que se inician) o tres días a la semana para realizar ejercicios intensos. Como pude ser el entrenamiento de pesas o crossfit (aunque luego matizaré algo sobre este último), pero no más de 30 minutos.

miércoles, 9 de octubre de 2013

PARTE 2ª:EMPEZANDO A OXIDAR LOS ÁCIDOS GRASOS

   En anteriores post, siempre avancé la importancia que tiene oxidar adecuadamente los ácidos grasos..., quizás ésa sea la clave para evitar los problemas metabólicos que suelen estar tan presente en la actualidad, la pregunta es: ¿cómo podemos lograrlo?

  Pero antes de continuar con el tema de éste post, quiero hablar de "las patas de la silla", (je,je). Habrá cuatro temas principales que se irán interrelacionando constantemente en éste protocolo o método de recuperación metabólica que son: nutrición, entrenamiento, voluntad y relajación-meditación. Estás son las cuatro patas de la silla..., todas son importantes, aunque tal vez unas más que otras; aunque sí tuviese que decantarme por un orden concreto elegiría, de mayor a menor importancia, el siguiente: voluntad, relajación-meditación, entrenamiento y nutrición. Voy a explicar brevemente el porqué de esta secuencia.

martes, 8 de octubre de 2013

LAS BACTERIAS SÍ QUE IMPORTAN

     La importancia de una alimentación rica y nutritiva no solo es una cuestión de vital importancia que atañe a nuestras propias células sino que la cantidad y calidad de lo que ingerimos también adquiere una relevancia extrema para lograr un equilibrio adecuado entre las diferentes colonias de bacterias que cohabitan en nuestros intestinos.

    Las diferencias entre la flora intestinal de personas delgadas y obesas es algo que nos debería hacer recapacitar, y máxime cuando experimentalmente se ha podido inducir obesidad en ratones que no lo eran simplemente por el trasplante de las bacterias de uno a otro. Pero la cuestión no solo atañe a la mayor capacidad que tienen algunas de estas bacterias para degradar alimentos previamente indigeribles y posibilitar una mayor absorción de calorías en forma de glucosa y ácidos grasos de cadena corta. Las bacterias de nuestro intestino también adquieren una importancia extrema en lo que se conoce como inflamación orgánica bajo grado, algo que podría causar una insensibilización a la insulina y derivar en problemas metabólicos mayores, como puede ser la diabetes tipo II.

PARTE 1ª: PROTOCOLO PARA RECUPERAR LA FLEXIBILIDAD METABÓLICA.

     Creo sinceramente que a pesar de la mucha información que sobre la paleodieta circula por la red, falta algo que para mí es de suma importancia: EL ORDEN EN EL QUE HACER LAS COSAS. No es infrecuente leer sobre determinados temas un tanto recurrentes dentro del mundo paleo, como puede ser la cetosis, las dietas low carb o altas en grasas, de los ayunos intermitentes, de la fructosa, de la termogénesis, del omega-3, del colesterol, de las grasas saturadas, de las grasas trans, de los azúcares, de la tiroides, del hígado, de hormonas..., de muchas hormonas, pero además también se suele (o solemos) señalar, de manera reiterada, a ciertos alimentos como los culpables de haber sumido al ser humano en una destrucción sin precedentes, mientras que a otros los elevamos, casi casi, a la categoría de divinos por sus excelentes propiedades naturales; pero si a todo esto, ya de por sí complicado, le añadimos el tipo de entrenamiento o actividad física que resulta más adecuado a nuestro estilo paleo, conseguimos que  la confusión domine completamente el panorama.